El Ministerio para la Transición Ecológica, dirigido por Teresa Ribera, ultima dos cambios que marcarán el futuro inmediato del trasvase Tajo-Segura y que reducirán el agua disponible para los regantes del Levante. Primero modificará las reglas de explotación, reduciendo las aportaciones, una decisión que se votará la próxima semana. Después subirá los caudales ecológicos del Tajo en el Plan Hidrológico de cuenca, que saldrá a consulta pública en abril. «Terminaremos todos en los tribunales», augura el presidente del Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura (Scrats), Lucas Jiménez.
El aviso sobre los planes del Gobierno llegó el lunes a través de una tribuna de la ministra titulada «Una nueva hoja de ruta para el trasvase Tajo-Segura».